Cuando lleguéis a casa, es probable que amigos y familiares quieran visitaros. No pasa nada por limitar las visitas para dar tiempo a tu familia a instalarse y acostumbrarse a vuestra nueva rutina. De hecho, los médicos suelen recomendar un número de visitas limitado cuando acabes de traer al bebé a casa, hasta que se le hayan dado las primeras vacunas⍰.
Cuando os sintáis listos para invitar a amigos o familiares a que os visiten a ti y a tu pequeño, puedes tomar precauciones para mantener a salvo a tu bebé y darte tranquilidad. Puedes pedir a tus visitas que se duchen antes de visitarte y que vengan directamente de casa (el mundo exterior está lleno de gérmenes⍰ y contaminación⍰), o que traigan un juego de ropa recién lavada para cambiarse en cuanto lleguen a tu casa. También puedes pedirles que dejen sus teléfonos móviles en la entrada (ya que los teléfonos transportan muchos gérmenes), que se laven las manos, que se recojan el pelo o que lleven una mascarilla. Aun así, se recomienda que la visitas en los primeros meses de vida de tu bebé sean breves.
Puede que te incomode que las visitas cojan a tu bebé en brazos o le toqueteen. Si es así, hazles saber tu preocupación antes de que lleguen. La mayoría de la gente lo entenderá, respetará tus deseos y querrá ser de ayuda. Los bebés prematuros pueden ser más sensibles a las luces brillantes y a los ruidos fuertes. Acortar las visitas también puede evitar que tu bebé se sobreestimule y ayudarle a adaptarse más cómodamente a su nuevo entorno.
Por último, recuerda que no pasa nada por decirle a tus familiares y amigos que quieres retrasar las visitas si necesitas más tiempo para asentarte en tu nueva familia. Tus seres queridos comprenderán tu necesidad de intimidad y de tiempo para establecer un vínculo con tu bebé.
¡Prohibido fumar!
Asegúrate de que nadie fume en la misma casa que tu bebé. Ser expuesto al humo del tabaco puede afectar al desarrollo de los pulmones, sobre todo en los bebés prematuros, y aumentar el riesgo de infecciones en las vías respiratorias. En caso de que tú o alguien en tu casa fume, debe lavarse las manos después de fumar y ponerse siempre ropa recién lavada. Ser expuesto al humo de tabaco también aumenta el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL)⍰ y, evidentemente, debe evitarse.
Reducir el riesgo de infección
Los bebés prematuros o enfermos tienen un mayor riesgo de contraer infecciones. Evita el contacto con cualquier persona que esté resfriada, tenga gripe⍰ o malestar de estómago para proteger a tu bebé. Lee más sobre cómo reconocer síntomas del malestar en tu bebé.