Para que tu bebé tenga un buen comienzo en la vida es importante cuidarse. Unos sencillos cambios de hábitos de vida pueden reducir el riesgo de parto prematuro y otras complicaciones durante el embarazo. Sin embargo, aunque tomes todas las precauciones posibles, pueden ocurrir cosas inesperadas que no están relacionadas con tu estilo de vida. Lo más importante que debes recordar es que hay información y apoyo a tu alcance para ayudarte en el proceso.

Otro paso importante que puedes dar para reducir el riesgo de enfermedad y parto prematuro en tu bebé es acudir a un centro que te pueda ofrecer atención sanitaria de alta calidad durante tu embarazo. Para aliviar tus preocupaciones puedes tratar de encontrar una fuente de información fiable y precisa, seguir consejos prácticos sobre la preparación para un posible ingreso en una unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN), y entender más sobre el proceso del parto, incluidas las opciones de parto vaginal⍰ o cesárea⍰. Aquí se resumirán las complicaciones más comunes que se tratan en una UCIN, para darte una idea de cómo se encargarán de tu bebé durante su estancia.