El sueño de tu bebé

Crear un entorno seguro para dormir es muy importante para todos los recién nacidos, especialmente para los prematuros o de bajo peso al nacer. Esto es lo que debes saber para asegurarte de que tu bebé duerme seguro en casa.

 

Colocación en posiciones seguras para dormir

 

Antes de dejar la unidad neonatal, el equipo médico te dará información sobre la mejor forma de dormir para tu bebé. Durante su estancia en la unidad, es posible que hayan colocado a tu bebé boca abajo (decúbito prono) para ayudarle con las dificultades a la hora de respirar. Sin embargo, esto sólo se hace mientras se vigilan continuamente sus constantes vitales (como los latidos del corazón y los niveles de oxígeno) para garantizar su seguridad. En casa, tu bebé debe dormir siempre boca arriba (posición supina) para reducir el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL). Evita que tu bebé duerma boca abajo o de lado, a menos que te lo recomiende específicamente un profesional sanitario. Consulta siempre a tu equipo médico para que te puedan dar recomendaciones individualizadas.

 

Entender el SMSL

 

El síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) se refiere a la muerte inesperada de un bebé aparentemente sano, la mayoría de las veces durante el primer año de vida. Se desconocen las causas exactas, pero se cree que influyen varios factores, como los problemas de desarrollo y las influencias en su entorno. Seguir unas pautas de sueño seguro puede reducir de forma importante el riesgo de SMSL.

 

Entorno de sueño seguro

 

  • Ten un espacio exclusivamente para que duerma tu bebé: los bebés que duermen en la cama de un adulto, en un sofá o en un sillón tienen un riesgo mucho mayor de SMSL.
  • Reduce la exposición al humo: Evita la exposición al humo de cigarrillos u otros productos del tabaco.  Si los adultos de la casa fuman, hay que animarles a que fumen fuera y a que se cambien de ropa después de fumar para minimizar el riesgo.
  • Colchón firme: Utiliza un colchón firme y transpirable. Evita las camas de agua, los cochecitos⍰ o los sacos como lugares para dormir.
  • Limpia la cuna: Mantén la cuna libre de ropa de cama mullida, almohadas, mantas y juguetes de peluche. Utiliza un saco de dormir para bebés en lugar de una manta para evitar que se tape la cara, la boca o la nariz.

 

Sacos de dormir para bebés

 

Los sacos de dormir para bebés son preferibles a los edredones o las mantas. Garantizan que el bebé permanezca cubierto y reducen el riesgo de sobrecalentamiento y asfixia. Hay sacos de dormir de distintos tamaños y para distintas temperaturas ambiente. Asegúrate de que el saco de dormir se ajusta bien, con el cuello y las mangas ceñidas para evitar que el bebé se pueda ir deslizando.

 

Regular la temperatura y evitar el sobrecalentamiento

 

  • Temperatura ambiente: Siempre que sea posible, mantén la temperatura ambiente entre 16 °C y 18 °C (61 °F y 64 °F). Evita colocar la cuna cerca de calefactores o a la luz directa del sol. Sin embargo, en los primeros días o semanas de vida los bebés muy pequeños pueden necesitar un ambiente más cálido para mantener una temperatura corporal normal. Pide consejo a tu enfermero/a o médico.
  • Ropa adecuada: Viste a tu bebé por capas, como lo haría un adulto. Evita el uso de gorros en interiores. Estima la temperatura de tu bebé poniéndole una mano en la nuca. Las manos y los pies suelen ser más fríos y no son dan una aproximación precisa. Sin embargo, si las manos y los pies están fríos y azules, lo más probable es que la temperatura ambiente sea demasiado baja. Asegúrate de que la habitación está bien ventilada, con aireación regular sin que el bebé acabe bajo un chorro de aire.

 

Recomendaciones para el colecho

 

Evita dormir en la misma cama que tu bebé para reducir los riesgos de sobrecalentamiento o asfixia. El lugar más seguro para tu bebé es una cuna o moisés⍰ en tu dormitorio durante al menos el primer año. Si prefieres tener a tu bebé cerca, considera la posibilidad de utilizar una cuna de colecho que se fije a tu cama.

 

El colecho puede ser arriesgado si el adulto que acompaña al bebé ha tomado alcohol o drogas. Para mantener a salvo a tu bebé, evita siempre el colecho en esas situaciones.